La depresión de Europa en el Mundial de Sudáfrica se cobró otra víctima de abolengo con el prematuro adiós de Italia, el campeón vigente. Y que el resto del mundo se prepare con Sudamérica: Paraguay elevó a tres la cantidad de los suyos que han avanzado como ganadores de grupo.
Sin brillar, Paraguay ganó el Grupo F tras empatar 0-0 con Nueva Zelanda y su rival de turno será Japón, que salió segundo en el E tras vencer 3-1 a Dinamarca. El líder de esa llave fue Holanda, cuya victoria 2-1 sobre Camerún le aseguró una cita con Eslovaquia en octavos.
El derrumbe de los Azzurri al perder el jueves 3-2 ante Eslovaquia deparó un par de hechos inéditos en la historia de los mundiales.
Fue la primera vez que los dos finalistas de la edición previa, ambos con los mismos entrenadores, empacaron las maletas tras la ronda inicial, ya que Francia corrió con la misma suerte. Ni siquiera pudieron ganar un partido y acabaron hundidos en el último lugar de sus llaves.
Peor para Italia es que nunca _en 17 presentaciones_ había terminado en la cola.
"No hay excusas. Si un equipo se presenta a una cita tan importante con el terror en las piernas, la cabeza, el corazón, quiere decir que el técnico no la preparó como corresponde", explicó el timonel italiano Marcello Lippi.
Al menos Italia no se fue envuelta en el escandaloso melodrama que acompañó de principio a fin a la Francia de Raymond Domenech, que incluyó la expulsión del delantero Nicolas Anelka por insultar soezmente al técnico y una huelga de jugadores.
Apenas después que Fabio Cannavaro levantaba la cuarta copa del mundo para Italia en el estadio olímpico de Berlín, Lippi se apartó. Pero fue por sólo dos años, volviendo tras la magra campaña de Roberto Donadoni en la Eurocopa de 2008.
Se jugó sus fichas con la base del equipo campeón de hace cuatro años, pero ese era uno con casi una decena de jugadores que superan los 30 años, varios de los cuales están en declive, como Cannavaro, Gennaro Gattuso o Gianluca Zambrotta.
"No me arrepiento. Estaba convencido de que nos iría mejor. Tal vez no ganar el torneo, pero hacer algo más", dijo Lippi.
Mientras varios de los grandes de Europa se debaten entre lamentos y reproches, Sudamérica sigue siendo la sensación de la primera cita en el continente africano.
Paraguay se sumó a Argentina y Uruguay entre los ganadores de grupo por parte de los representantes de la Conmebol. Y tampoco hay que ignorar a México, el equipo de la CONCACAF, que escoltó a Uruguay en un grupo en que los damnificados fueron el país anfitrión y los franceses.
Las cuentas de los equipos sudamericanos son casi impecables: 10 victorias, tres empates y ninguna derrota. Sumando a Brasil, cuatro se han clasificado a los octavos de final, mientras que un quinto, Chile, podría hacerlo el viernes. Brasil también intentará asegurar ese día ganar su grupo.
Si Chile concreta su pase, Sudamérica conseguiría que todos los suyos avancen. La última vez que eso ocurrió fue en Italia 1990, donde Argentina, Brasil, Colombia y Uruguay sortearon la primera ronda.
Gerardo Martino, el técnico argentino de Paraguay, destacó el brillante presente de su región y confió que la tónica seguirá en las rondas siguientes.
"A falta de lo que suceda con Chile y Brasil, indudablemente el fútbol latinoamericano ha mostrado cierta superioridad con el resto de los continentes", afirmó Martino.
"Todo lo que está pasando hace vislumbrar, a partir de las eliminaciones que se puedan dar, que hay muchas chances de que sea una latinoamericano o tal vez dos los que disputen la final".
Y lo más llamativo es que la segunda fase casi seguramente tendrá más representantes de Asia que de Africa, el continente anfitrión. Con el pase de Corea del Sur y ahora el de Japón, esta es la primera vez que dos asiáticos sortean la primera etapa en un torneo del cual no son locales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario