Exactamente a mitad del ciclo olímpico de Beijing a Londres, todavía no se vislumbra una formación estable para el boxeo cubano; sin embargo, no debemos tener demasiada preocupación, porque las sustituciones que se produjeron ahora, están determinadas por los últimos resultados.
Sucede que en el torneo nacional Playa Girón, en el internacional Giraldo Córdova Cardín y en la Olimpiada Nacional, varios de los integrantes del equipo mundialista cayeron derrotados por otros miembros de la preselección nacional, en demostración de que el líder en la mayoría de las divisiones ha cambiado.
Incluso, se pueden producir otros cambios, porque entre los que están en Quito hay algún que otro caso con más de una derrota en casa, y que ahora tendrán una nueva oportunidad para demostrar su calidad, o podrían ser relevados para próximos compromisos.
Aún con una renovación de más del 60 por ciento de sus integrantes, el equipo cubano de boxeo debe imponerse en la confrontación de América; incluso, posiblemente se alcance la victoria, y no por estrecho margen, porque la calidad de nuestro pugilismo está dada por una gran cantidad de talentos.
Por ejemplo, en la división de los pesos mosca, Yorman Rodríguez lo ha ganado todo, por lo que es él, hoy por hoy, nuestro mejor representante en los 51 kilos. Y lo mismo ocurre en la división de los 81 kilogramos; Julio César la Cruz ha resultado indetenible, por lo que se ganó la titularidad entre los completos.
Tampoco hemos tenido estabilidad, ni en los welter, ni en los supercompletos; no obstante, Carlos Banteur y Robert Alfonso han recibido una nueva oportunidad, para que demuestren sus posibilidades.
En resumen, son muchos los cambios, pero el boxeo cubano se hará sentir y continuará su paso firme, primero hacia los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011 y luego, hacia Londres 2012.
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