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Víctor Batista, posa frente a su obra. |
En el local que ocupaba años atrás la
fábrica de paniqueques de la barriada del Naranjal, donde mismo radicó la
dirección del desaparecido Combinado Deportivo, un profesor Víctor Batista y el
activista Jorge Rubio tras el paso del
huracán Sandy se dieron a la tarea de recuperar la instalación para la practica
del milenario deporte creado por Yigoro Kano, el judo.
Tras varios tropezones, luchar contra los
obstáculos, contra los no se puede y otras negativas
burocráticas, el incansable dueto logró poner en marcha en ansiado gimnasio, que por no contar con un colchón o
tatami de 8 por 8 metros, no podemos
considerarlo
entre los mejores de la provincia, pero de que va a dar sus
frutos, de eso estamos seguros.
Muchas veces hubo que conversar, hasta el
convencimiento con la dirección municipal de deportes para que les entregara
las tejas de fibrocementos, las persianas metálicas, tres libras de clavos,
unas puertas y unos galones de pintura. Con otras instituciones lograron las
alfardas para el techo, así como los parales y travesaños; con todos esos
materiales y un entusiasmo sin límite, estos amantes del judo han logrado
levantar su gimnasio, donde el levantamiento de pesas también se ve
beneficiado.
Ahora la lucha continúa, porque aún no
tienen agua corriente, el sistema
sanitario tiene serios problemas y todavía no le han instalado el sistema
eléctrico para trabajar en horas nocturnas con las categorías mayores.
“Estamos muy contento a pesar que aun
falta por solucionar algunos problemas como el agua y la corriente y que el
colchón solo tenga 8,5
metros de largo por 6 de ancho, pero así sacaremos
atletas para los centros de alto rendimiento y para eventos nacionales” .-
aseguró el licenciado Víctor Batista profesor principal del judo mayaricero , y
aseguró.- queremos ubicar algunas literas en el cuarto del fondo para traer a
los niños de las montañas a entrenar, así como a los atletas de otros
Combinados cuando haya que hacer un concentrado,” aseveró.
Mayarí en la actualidad cuenta con una
profesora, Aliuska Acosta que labora en la zona de Guaro que junto al activista
Luís Manuel Quiala tratan de sacarle mayor provecho a una de las mejores áreas
de judo de la provincia.” Esa es la el área más espaciosa de la provincia, muy
bien podía ser la mejor, pero no tiene iluminación para trabajar con los
mayores y por falta de unos cartones se moja cuando llueve, en Nicaro tenemos
un colchón bastante bueno, pero no existe el profesor para que trabaje.-
asegura el jefe técnico del judo mayaricero.
En estos momentos en la EIDE, Mayarí tiene solamente a
tres atletas, todas procedentes de la
zona de Pinares de Mayarí, donde existe un área en Vivero Dos perteneciente a
la empresa Pecuaria que ya ha dado sus frutos, como son los casos de la
campeona de los pasados juegos nacionales escolares nacional Aleoxana Ramos, a
la doble medallista de plata Tatiana Montero, Iluminada Lobaina quien entró a la EIDE en judo, ahora es de Levantamiento
de pesas y Rudy Gómez.
Sobre el área de Pinares, Víctor nos
dijo,” esa es una excelente instalación, muy amplia, imaginase es un almacén
que no se utiliza, por ello el delegado Pedro Espinosa nos ayudó a crearla con
el apoyo de los vecinos y la dirección de la escuela 28 de septiembre de la
localidad, ahora estamos haciendo gestiones para conseguir unas costaneras para
cerrar por completo el área y tenerla lista para cuando se gradúe en julio
próximo Yosbel Acosta, un alumno nuestro que estuvo también en la EIDE y más tarde en la ESPA y ahora se graduará y
tendrá la responsabilidad de seguir formando a los judocas de esa zona,”
aseguró Víctor.
Tras conversar con este destacado
entrenador, podemos asegurar que el milenario arte marcial en Mayarí tiene una
buena base para fortalecerse, porque con hombres como Víctor Batista y sus
activistas nada es difícil y sabrán llevarlo a lo más alto del podio.